EL CAPÍTULO DE HOY SE LLAMA SOLEDAD

Mujer Vaso Frágil Pero Firme


He escuchado mucho decir que no necesitas estar solo para sentirte solo, y es muy cierto, porque puedes estar rodeado de personas y sentir una soledad muy grande.
¿Y que haces cuando te sientes así?
Cuando estamos rodeados de muchas personas estamos tan ocupados, escuchamos, consolamos, pasamos un tiempo atendiendo y siendo atendidos, y al llegar a casa darnos cuenta que no es suficiente, y cuando estamos solos entonces buscamos a alguien que nos escuche, a alguien con quién hablar, alguien con quién animarse o desanimarse mutuamente, ¿pero que pasa si Dios aleja a todos y quedamos totalmente aislados?
Es allí cuando de repente nos acordamos de Dios, entonces muchas veces Dios permite ese aislamiento para que le busquemos, al hacerlo, nos permite ver nuestra condición, que caminamos sin Dios en todo lo que hacemos.
Cuando buscas a Dios el permite ver tu vacío para llenarlo, es allí cuando te das cuenta que ni las muchas amistades, ni las riquezas, ni la fama puede llenarte, solo reconocer tu necesidad de Dios y buscarle a El, cambiará el sentido que tenían tus pasos, solo Dios puede cambiar tus prioridades, solo El puede hacer que el tiempo que compartas con otros sea productivo.
Mira a mi diestra y observa, pues no hay quien me quiera conocer;No tengo refugio, ni hay quien cuide de mi vida. Clamé a ti, oh Jehová;Dije: Tú eres mi esperanza,Y mi porción en la tierra de los vivientes.
Salmos 142:4-5

©Eulenis Madrid
Viviendo para Él
Tags

Publicar un comentario

0Comentarios

Publicar un comentario (0)